Cuando Héctor o Aquiles no tienen la suerte de morir en Troya, se convierten en Ulises intentando regresar a Ítaca bajo un cielo sin dioses, y llamándose Nadie para sobrevivir en la cueva del cíclope.

Cualquiera puede ser Héctor o Aquiles. Lo difícil es ser Ulises con una Troya ardiendo en la memoria.

12 dic 2011

EL OTRO LADO


El último recuerdo que tengo es de mí mismo, sobre la mesa de operaciones,  contando hasta diez por orden del anestesista. Después de eso un interminable vacío y, de repente, una luz muy brillante al fondo que me invitaba incontrolablemente a seguirla. Sabía que aquello podía ocurrir, era una posibilidad y había pensado mucho en ello. Tenía preparado un plan. Todavía no había llegado mi hora.

Me giré dando la espalda a la atractiva luz, dirigiendo mi conciencia en sentido opuesto, con la firme intención de dejarla atrás lo mas aprisa posible. Me sumergí en la más absoluta oscuridad en lo que me pareció un trayecto eterno cuando, al fin, esperanzado escuché una voz amable que decía “Tranquilo, ya estás entre nosotros”. Profundamente aliviado fui recuperando la consciencia hasta que pude ver al propietario de la voz, de piel rojiza, retorcidos cuernos y barba de chivo mientras me sonreía mostrando sus dientes amarillentos en señal de bienvenida.



10 nov 2011

RUTINAS INDISPENSABLES


     Sir Isaac Newton era sin duda un hombre de costumbres. Cada mañana, tras el habitual desayuno, salía a caminar por el mismo recorrido, haciendo el mismo alto en idéntico lugar, un fértil manzano cuya sombra le servía de cobijo para recostarse a meditar.

            Aquel día, sin motivo aparente, decidió hacer la acostumbrada parada en un frondoso roble, unos pasos más alejado de su camino. Nunca fue consciente de la gravedad del asunto.






1er Premio en el  VIII Certamen Internacional de literatura hiperbreve Pompas de papel.




22 oct 2011

ACCIDENTE DOMÉSTICO



 
Junto a la silla con una pata resquebrajada, descansaba una manoseada nota:
“Sr. Juez, si está usted leyendo estas palabras, sepa que esto ha sido, sin lugar a dudas, un accidente. Desde que puedo recordar, subo cada noche a esa silla, paso la cuerda por mi cuello, maldigo mi cobardía y me voy a la cama envuelto en llanto.”




Relato finalista del I Concurso Internacional de microrrelatos ACEN y publicado en el recopilatorio “Bocados Sabrosos”.


26 sept 2011

UNA VIDA DE PELÍCULA

* Este microrrelato fue un experimento literario con motivo de la celebración de un certámen de relatos de cine. Debió de gustar pues resultó finalista-seleccionado para la publicación "Deseos Humanos". Esta construido con títulos o alusiones a algunas de las peliculas más  oscarizadas de la historia del cine. Espero que os guste



UNA VIDA DE PELÍCULA


Un tal  ciudadano Kane siguió el camino de baldosas amarillas, en busca de  las luces de la ciudad que se dibujaban a lo lejos. En su odisea personal anduvo bailando con lobos, cantando bajo la lluvia, y doce hombres sin piedad le enseñaron que la vida es bella, que a un ladrón de bicicletas no lo mueve necesariamente la perversidad y que, en estos tiempos modernosmatar a un ruiseñor, persiguiendo la quimera del oro, únicamente se paga con cadena perpetua

Un bonito amanecer, al volver la vista atrás, se supo con la muerte en los talones y, lejos de pensar en su perdición, se alegró profundamente, pese a no haber alcanzado su destino, de no haber cogido aquel tranvía llamado deseo y  de haber seguido esos senderos de gloria hasta alcanzar el merecido crepúsculo de los dioses, donde uno ya no se preocupa por lo que el viento se llevó, y únicamente se escucha el silencio de los corderos.

                                                                                                                                     THE END




26 jul 2011

SEGÚN SE MIRE



-           ¿Y cuándo será el incendio?
-          ¡Señora, el incendio es ahora! Hemos desalojado el edificio entero, sólo queda usted.
-          ¿No puedes esperar un poco, hijo? Acaba de empezar la telenovela.
-          ¡Por el amor de dios! ¿Acaso quiere morir en el sillón de su casa mientras ve tranquilamente su telenovela?

            El bombero, perplejo, sopesó sus palabras, al ver dibujarse una sonrisa sobre el rostro de la anciana, mientras parte del techo cedía y se desplomaba.

Una vez extinguidas las llamas, un grupo de vecinos comentaban la muerte de la señora Agnes.

-          “Que muerte tan espantosa”, apuntó uno de ellos.




11 jul 2011

COSAS DE NIÑOS



-          ¿Puedo quedarme con sus juguetes?

Mi madre y yo, reunidas como cada tarde,  lo observamos incorporarse en la cama, una vez más, soltar su frase, y volver a cerrar los ojos. Llevaba haciendo lo mismo veinte años.  La primera vez que lo hizo, saliendo momentáneamente del coma, nos llevamos un susto terrible. Ahora, que se había convertido en una rutina diaria durante dos décadas, apenas le prestábamos atención, pero allí seguíamos, cada una con sus preocupaciones. Ella, a la espera de recuperar algún día a su hijo, y yo, preguntándome si dije en voz alta  lo que pensaba mientras lo empujaba por la escalera.