Cuando Héctor o Aquiles no tienen la suerte de morir en Troya, se convierten en Ulises intentando regresar a Ítaca bajo un cielo sin dioses, y llamándose Nadie para sobrevivir en la cueva del cíclope.

Cualquiera puede ser Héctor o Aquiles. Lo difícil es ser Ulises con una Troya ardiendo en la memoria.

10 nov 2011

RUTINAS INDISPENSABLES


     Sir Isaac Newton era sin duda un hombre de costumbres. Cada mañana, tras el habitual desayuno, salía a caminar por el mismo recorrido, haciendo el mismo alto en idéntico lugar, un fértil manzano cuya sombra le servía de cobijo para recostarse a meditar.

            Aquel día, sin motivo aparente, decidió hacer la acostumbrada parada en un frondoso roble, unos pasos más alejado de su camino. Nunca fue consciente de la gravedad del asunto.






1er Premio en el  VIII Certamen Internacional de literatura hiperbreve Pompas de papel.