Cuando Wendy se percató de que Peter se encontraba al otro lado del cristal de la ventana ya fue demasiado tarde. Se quitó a su amante de encima como pudo y, desnuda, corrió para tratar de alcanzarlo y darle una explicación que no existía, antes de que su sombra se perdiese en la oscuridad.
Aquella noche Peter se dejó atrapar al fin por los piratas, y pese a lo que ellos pudiesen pensar, no era la muerte lo que buscaba, sino la posibilidad de conseguir un buen vaso de ron.
Bravo! me ha encantado. Un dia deberíamos explorar el complejo de Peter Pan reinante... con un ron delante:)
ResponderEliminarAlatriste, este microrrelato me ha encantado, me parece buenísimo.
ResponderEliminarUn placer leerte (como siempre).
Por cierto gracias por tu visita a mi blog de libros (viajes desde el sillón), no sé si has visto sólo ése y es al que te refieres o el general(pulgacroft), bueno de sea cual fuere gracias y me alegro de que te haya gustado.
También llevo uno de cine (Polemicine) con otros blogueros que es una especie de club de lectura pero con películas, votamos unas películas y la que salga la vemos y la comentamos. si te gusta el cine te invito a participar. Tienes los enlaces en mi blog PULGACROFT.
Gracias de nuevo y un saludo!!
Acabo de leerlo en elperiodicodeyecla.com y me ha encantado. Es sencillo y rendondo. ¡Enhorabuena!
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